Llevo un tiempo viéndolo así y quería hacer una reflexión y compartirla aquí contigo. Ayer por la mañana publicaba en mis redes sociales una foto del Campus de Google. Estoy asistiendo a sesiones de formación en el campus for mums y son interesantes y enriquecedoras. Creo que es importante seguir aprendiendo, actualizarse cuando estás metida en el mundo digital e intentando emprender es básico y estar en contacto con otros emprendedores llena de energía positiva también. Que si, que soy publicitaria y mucha gente cree que eso ya es suficiente para gestionar la relación con las marcas desde el blog pero…no lo es. El mundo digital va más rápido de lo que podemos asimilar y hay que pillar al vuelo cada consejo y formación.
Por la tarde compartí una foto jugando a plastilina con Amaya y Mateo. Mis tardes son, afortunadamente, con ellos. Les recojo en el colegio, les llevo la merienda y tenemos de 17h a 21h para estar juntos. Parque, juegos, mimos y alguna peleilla, claro que si, no soy Mary Poppins.
Siempre trato de dedicarles tiempo de calidad pero a veces es difícil porque las cosas de casa también están ahí, levantando la mano con urgencia. Ya sabes a lo que me refiero…poner lavadoras entre juego y juego, ponerles 20 minutos de dibujos para dejar en marcha la cena, responder un mail cuando vas al baño… Y…de repente me vi a mi misma desde fuera y me pareció ser 3 personas diferentes.
Muchas madres vivimos esta triple vida. Que en realidad es solo UNA muy intensa aunque a veces tienes que cubrir facetas tan diferentes que tienes la sensación de desdoblarte, triplicarte y de hacer malabares.
En nuestra agenda conviven de manera natural las citas relacionadas con el trabajo, las citas médicas de revisión de los 24 meses, de extraescolares o de la vida social de nuestros pequeños (que sin duda es a veces más rica que las nuestras en cuanto empiezan el «modo celebración de cumpleaños de amigos ON»), y salteado por ahí alguna cita nuestra (una cena con amigas, un día que te escapas a la peluquería, un dia que puedes comer con tu chico haciendo una gincana, un «no te olvides de comprar el regalo para…» etc…)
Somos madres, trabajadoras dentro y fuera de casa y también somos personitas individuales (aunque a veces esa faceta quede en una esquina del tiempo que podemos dedicarnos). Hay veces que no quiero ser «la mamá de Amaya y Mateo» ni «Oh my mum!», necesito ser Belén un ratito al día para no desconectar de las cosas que me gustan, de mis inquietudes, de hacer esa llamada a una amiga que llevas días posponiendo, de escaparte con tu chico de la mano o de dedicar 20 minutos a bucear por esa tienda online de cosas monas. 24 horas son pocas para las tres vidas…y no hay escuela de gestión de tiempo así que nos toca hacer el ejercicio de equilibrar para llegar a todo.
¿Llegar a todo?. No, yo no llego a todo. Con el segundo hijo te das cuenta de esto, lo asimilas, lo asumes y te relajas. Y conviertes en una máxima la siguiente afirmación: «Si no llego es porque realmente no es importante». Es pura supervivencia, lo se. Pero es mejor quitarse el lastre de tener que ser una superwoman-supermamá-multitarea y asumir que no es posible llegar a todo.
Me concentro bien, bastante bien, la verdad. Pero siempre que estoy en «tránsito» tengo varios temas dando vueltas en la cabeza. Mientras te duchas piensas en que hace falta comprar leche y pañales, mientras bajas en el ascensor respondes un mail, en el bus vas organizando el orden de cosas que tienes que hacer y en paralelo recibes un whastapp del grupo de madres del cole … Personalmente me gusta esta triple vida, de hecho se entrelazan de forma natural y me hacen ser quien soy y a día de hoy me gusto más que hace 10 años. Pero hay días o ratitos que me agobia y ese día decido que «doy el día libre» a una de las tres. Y no pasa nada. NA-DA.
Echo de menos sentarme en el sofá y no pensar en nada. ¿Cuándo fue la última vez que te sentaste y te quedaste en encefalograma plano?. Ni spa, ni cena con copas ni leches, «sentarme en el sofá con encefalograma plano». Ese es el planazo que deseo en ocasiones.
Este post no es una queja. No me quejo, me gusta ser polifacética o multitarea o triwoman o como quieras decirlo. Soy todas esas personas en una y ahora me siento más completa que hace años. Este post es solo un desahogo porque, aunque me guste la vida TRI también me gusta relajarme y disfrutar de cada faceta por separado y me falta tiempo para hacerlo y muchas veces no es fácil.
No se si me ha quedado un texto un poco ambiguo pero estoy segura de que me entiendes perfectamente…
Y tu, ¿eres triwoman también?.
¡Feliz día!
Ay Belén, pero bien bien que te entiendo!!!! no me puedo sentir más identificada contigo. No puedo añadir más porque ya lo has dicho tu todo. Un besazo y ánimo con el día!!!!!
Yo lo que tengo que aprender es a ser sólo una de estas tres trimwoman y no sentir culpa por dejar aparacadas las otras dos. Ese es mi reto. Me ha encantado el post.
Gracias Sonia! Es cuestión de probar, como todo…deja un día aparcadas las responsabilidades de casa…no pasa NADA. :-)
Ánimo también! y gracias! :-)
Muy bien explicado!! Yo creo que soy cuatriwoman porque acostumbro a dedicar al menos 5 minutos al día (a veces son más) al encefalograma plano. Es justo después de dormir a los peques y es un momento que comparto tan a gustito con mi pareja en el sofá. Después igual me pongo con un post, él se va arreglar la cocina… y seguimos
Tu encima con dos a la vez! pues si, cuatriwoman!!! y OLE por conseguir el encefalograma plano!!!!!
Belén una sugerencia…. ¿ Por qué no escribes un libro???? Creo que con lo bien que escribes y conectas con todo el mundo sería una pasada! Como una guía espiritual para mamis…jejjejeje
el Blog se te queda pequeño amiga para tantas cosas bonitas que contarnos!!!!
Muakkkk
Natalia
Anda anda! Que me sacas los colores! eso son palabras mayores! Con la de vueltas que les doy a los textos!!! jajajaja. Pero mil gracias por pensarlo. Un besazo
Yo me he sentido 100% identificada, de hecho, leyéndote me doy cuenta de que lo que necesito también es tumbarme y no hacer nada, a mí me cuesta y sobre todo me hace falta repetirme que por dar el día libre a una de ella no pasa NA-DA, madre mía lo que me cuesta!! Un reto para cumplir.
Genial reflexión.
Ay, Belén. Justo pensaba eso ayer, que no llego a todo. No llego ni de lejos. Ni de broma, vaya! 2 hijos, 2 trabajos y una vida… Tampoco me quejo, porque aunque hay día que me visualizo yendo al aeropuerto y comprando el primer billete con destino al Caribe, en el fondo, me lo paso bomba ¡la mayoría de los días! Un post genial, Belén!
Me ha encantado el Post Belén. Plasmas perfectamente lo que muchas sienten. Yo. desafortunadamente no trabajo fuera de casa, aunque entre los tres , si le sumamos que el mayor necesita terapias todas las gtardes toda la tarde (con lo que uno ha de estar en exclusiva) y que mi marido está no con poca frecuencia fuera, a veces me siento así también. Me falta tiempo, y no poder con todo me estresa. Pero hay días que sí, que dejo una, porque a no ser que el padre se lleve a los niños durante un rato, de ellos pobrecillos no podemos desatendernos, ¿no? Pero sí lo hago de la casa o del blog. De nuevo, me ha gustado mucho. Un besote
Hola Belén ,
claro que te entiendo , te entiendo perfectamente . Hace ya un tiempo que me di cuenta que no puedo llegar a todo ni quiero . Que no soy una súper woman , ni una súper mamá ,ni quiero serlo . Lo único que quiero es poder disfrutar más calmadamente de mis hijos , sin prisas ni agobios . Poder ver como crecen , como aprenden y compartir más momentos juntos . No mirarlos un día y darme cuenta que se han hecho grandes y no haberme dado cuenta . También tengo momentos en el día que no quiero saber nada de niños , ni de tareas , ni de responsabilidades , solo sentarme en el sillón y no hacer nada , absolutamente nada , ni pensar ; ) . Es que todos lo necesitamos , cuerpo y mente tienen que tener un momento de descanso .
Besos ,
Nuria
Vaya que si te entiendo…imposible expresarlo mejor…yo tb soy una de esas..
Uf, otra que se siente completamente identificada, pero que aún no ha conseguido un equilibrio a pesar de que mis chicas ya van siendo mayorcitas. Acabo los días reventada. Demasiada carga.
Y eso que salgo a las tres (con horario completo), que tengo la tarde libre. Pero entre que llego a casa, como, recojo a las chicas, extraescolares o parque, compra, lavadoras, cenas y comida del día siguiente… cuando me siento, son las diez y pico y no puedo ni con las pestañas.
Identifiacada por completo. Ya ni me acuerdo de lo que es dedicarme un momento y si me lo dedico estoy pensando en todo lo que tengo, quiero hacer y me siento fatal…como si no tuviera derecho a no hacer nada. Este año decidí reglarme diez minutos para no hacer nada y sin remordimientos y cuando lo consigo me carga las pilas para unos días.
Besos
Hoy, en cinco palabritas te digo que «estoy de acuerdo en todo» (estas son las cinco palabritas)
Y que ahora yo me siento sextiwoman porque además de todo lo que cuentas, tengo a tu papi que es peor que dos hijos pequeños y, de vez en cuando y me encanta, me llamáis, tú o tu hemano para ver si podemos pasar por el cole a recoger a los peques.
Claro que somos superwoman y como dices, NO PASA NADA si no llegamos a algo porque cinco minutos más tarde lo haremos.
Besos chicas, ya llega el finde :-)
triwoman? o cuatriwoman..jaja con dos pequeños,un trabajo a jornada partida,extraescolares de la mayor,competiciones de fin de semana y mientras tanto sacando el pecho en cualquier lugar para dar de comer al pequeño.Ya no recuerdo la ultima vez que fui a la steticien a depilarme o simplemente hacerme la manicura o dar un paseo a solas con mi chico.Hago verdaderos malabares para cuadrar las notas y las reuniones del colegio y no llegar tarde al trabajo.Y si sumamos a esto ,la casa,las compras..y una mudanza que estoy a punto de hacer no se como aún no me he tirado por el balcón.Aunque como tú dices…en el fondo me encanta ser esas tres mujeres q aunque lo intentamos no siempre llegamos a todo y cuidar y mimar a mi familia en el tiempo libre que mi dia de locos me deja.Lo de llegar a tener ese rato de encefalograma plano…una utopia?? jajja.Gracias por compartir tus post con nosotras.Muchos besos y ánimo.
Yo también soy Tri, aunque solo con una peque, y te entiendo perfectamente. Hace tres años que no veo una película y he dejado de ver series porque era imposible seguirlas.
La triple vida mola!!!! porque como bien dices a veces esta bien dejar una aparcada, esta semana tengo 4 vidas porque me esta tocando atender al cuarto hijo al padre de las criaturas soy su chofer y enfermera eso si la semana se ha pasado volando. Cuando quieras hablamos lo de los aceites!!
Besos
Un post para releer muy a menudo. ¿Sabes esos post que lees y piensas «jo, por qué no lo habré escrito yo»? Pues eso me pasa leyéndote, e imagino que no soy la única.
En mi caso, y siguiendo con tu enfoque, yo diría que soy cuatri, ya que mi trabajo (remunerado) nada tiene que ver con el blog, así que el blog es otra parte de mí, además de la familia, el trabajo y «mi yo».
Pero me ha encantado lo de dar el día libre a una de las tres «vidas»; empezaré a hacerlo yo también, aunque inconscientemente estoysegura de que lo vengo haciendo desde hace mucho.
Genial post, felicidades. Lo comparto.
Triwoman no porque estoy en el paro y no trabajo fuera de casa, pero bi woman si… El peque va a la guarde por las mañanas y yo puedo dedicarme a buscar trabajo y estudiar, pero por las tardes ya empieza la fiesta!! Merendar, jugar, alguna rabieta, parque… y entre medias dejar la cena medio apañada (y eso que papi colabora mucho en casa).
Muy bueno tu post… :-)
Ahora que también tengo dos peques y que también soy trimadre te tengo que dar la razón en TO-DO….como siempre!!
Y no escribo más porque tengo que ir a dormir a la peque, poner la mesa, terminar de hacer la comida, mandar un mail, poner una lavadora…sigo??? jajaja
Besos guapisima!!!!
Hello Marie Lou… y muchas felicidades por esta peque que te ha hecho TRIwoman!!
Un beso grande
Tienes más razon que un santo, como decimos las trimadres. Por eso comparto el post. Por eso y porque me ha gustado mucho como te has explicado.
Y lo de asumir que no llegamos a todo a mí me está costando…
Un abrazo Belen.
Gracias Patricia! es un ejercicio diario. Cuando asumes que no llegas, empiezas a ver cosas que hacías que realmente no son importantes. UN besazo
100% de acuerdo! ;)
Creo que a las madres nos gusta complicarnos la vida a veces jeje pero esas cosillas y extras que intentamos meter con calzador en nuestra agenda es lo que nos hace disfrutar más de la semana.
Yo tampoco llego a todo y hay días que decido dejar de lado muchas cosas y cojo a mi peque y nos vamos de compras o a comer con la abuela. Y la lavadora ya la pondré mañana ;)
Hacía mucho que no me pasaba por aquí, me estoy poniendo al día jeje
Besos!