«Mamá, no apagues tu luz…». Eso le decía yo cuando era pequeña a mi madre cada noche… y es que la oscuridad es algo que a casi todos los niños les aterra. Es algo normal, propio de su desarrollo, pero también es cierto que se les puede ayudar a superarlo. En este artículo que he encontrado dan varios consejos para conseguir superar el miedo a la oscuridad.
Yo que lo viví estoy especialmente sensibilizada con este tema y…Amaya ha «heredado» mi miedo a la oscuridad.
Cuando se hace de noche y comienzan las sombras en casa, veo cómo busca sentarse resguardada, cómo mira con recelo hacia la puerta de entrada y cómo se niega a ir sola al baño o a la cocina si la luz está apagada.
La oscuridad deforma la realidad, el miedo despierta una imaginación feroz y es incontrolable. ( Yo recuerdo que los ojos de la muñeca Selene se iluminaban cuando le girabas un colgante redondo que llevaba al cuello y….era aterrador cuando por alguna razón en medio de la noche lucían. Busca en google, ¡verás que daba miedo de verdad!).
Ella duerme con su hermano pequeño pero eso no es consuelo suficiente cuando se despierta en mitad de la noche y no hay luz. Tenemos una lámpara que proyecta estrellitas al techo de la habitación pero se apaga tras 30 minutos así que sólo da de sí hasta que se quedan dormidos. He probado con luces quitamiedos en el enchufe que hay a la entrada de la habitación pero la luz que dan es espantosa y crean muchas más sombras así que casi es peor.
Ella duerme abrazada a alguno de sus muñecos, se tapa la cabeza con las sábanas para «esconderse» y te pide que le des la mano y te quedes un ratito. Es una etapa que hay que pasar y me niego a dejarla sola en la cama aterrorizada.
Hace unas semanas se pusieron en contacto conmigo desde Babymoov y nos hicieron llegar su lámpara Tweesty. La verdad es que nos venía genial poder tener algo así y la hemos probado con toda la ilusión del mundo desde ese día. Obviamente el miedo a la oscuridad sigue ahí, pero si ella se despierta en mitad de la noche está un poco más tranquila al poder ver. Tiene asa para poder dejar colgada de la barrera de la cama y tiene un tamaño muy cómodo para que Amaya la tenga cogida si lo prefiere. Tiene música (esto le ha encantado a Mateo), puedes elegir el color de la luz y además dura encendida unas 11 horas tras recargarla, vamos, que da para toda la noche.
Tener esa luz tenue la tranquiliza a la hora de dormirse y también si se despierta (aunque me llame pero así no lo hace a grito pelado) y para mi es incluso práctico, por ejemplo, cuando entro a arroparles o ponerle el chupete a Mateo o a la hora de tener que dar alguna medicina o tomar la temperatura.
De momento, la estamos usando a diario. Amaya se queda dormida con la luz debajo de las sábanas y después yo se la paso a la mesilla. Espero que poco a poco vaya pasando esta etapa de los miedos y al menos se que así es más llevadero.
Y tu peque, ¿tienen miedo a la oscuridad?
Nosotros también usamos una luz similar en la habitación de Carla. En nuestro caso duerme en camita (la pasamos al año y poco para darla más autonomía) y le da la oportunidad de bajarse de la cama y venir a nuestra habitación si tiene miedo.
Como dices es una época que hay que pasar… ánimo.
Hola Paula! Amaya duerme en cama hace mucho también, pero como es cama alta tiene la barrera por si las moscas!! De momento no se baja, prefiere avisar y que vayamos y casi lo prefiero porque sino los paseos nocturnos serían constantes!
Un beso grande!
Los míos sí, pero como yo también lo tengo a día de hoy, les entiendo perfectamente. Somos usuarios también de luces externas que nos sirvan de guía y referencia en caso de despertares nocturnos (que sufrimos muchos….).
Me gusta mucho el post y el artículo.
El miedo es libre, comprendámoslo, y arropémoslos.
Totalmente de acuerdo, hay que comprender su miedo, respetar sus tiempos y acompañarles para superarlo juntos. :-) Gracias por comentar.:-)
En esta casa la que tiene miedo soy yo, así que mira que consuelo, solo te diré que cuando no está mi chico, que es la mitad del tiempo, dormimos con una lámpara de la entrada encendida jajajaja, um cuadro.
Y en los hoteles, que también estoy media vida en hoteles, duermo o con la luz del baño encendida, o hay habitaciones que tienen como una entradita y luego ya la habitación en sí, pues la luz de esa entrada, jajajaja.
Saioa duerme con las bolas de luces de «La Case du cousin paul» dan una luz preciosas, pero claro hay que ir a apagarlas, porque más de una mañana ha amanecido con ellas encendidas.
En casa de mis padres sí tiene una luz quita miedos, porque en el pueblo hay practicamente una oscuridad absoluta y si bien, miedo miedo no tiene, si se levanta al servicio o algo, no se ve absolutamente nada.
Ánimo, son épocas, aunque mira yo jajajaja, pero de pequeña no era tanto como ahora, y cada vez lo soy menos, bueno no, eso es algo que me digo para animarme.
Qué cosas eh? yo duermo (muy a pesar de mi chico) con la persiana sin bajar. La luz de la calle es suficiente, no por miedo en si, sino porque no me gusta despertarme y no ver nada, necesito unas referencias mínimas de dónde estoy. Vivan las luces quitamiedos!!! El año que viene no te dejo perderte PuntoMOM. :-)
Puf, no veas si este post me toca la fibra….yo soy de las que lo sufren a día de hoy! 35 añazos y si estoy sola no puedo dormir a oscuras. Teo de momento no tiene miedo, pero temo el día que lo tenga. Yo recuerdo que sin la luz del armario encendida no podía dormir, y ya bastante mayorcita, pero también lo de las sombras era un drama….
Hola Marta! Van a tener que sacar la luz quitamiedos para madres! jajaja. Es algo que no se controla. Seguro que si Teo tiene miedo a la oscuridad sabrás cómo ayudarle a pasarlo. Mil gracias por pasarte por aquí!
Un abrazo
Nosotros usamos una luz toda la noche.. más que nada porque nuestra peque se levanta y tenemos miedo que se nos caiga si va a oscuras !!
Por cierto, tienes un premio esperándote en «Entre Pañales y Biberones», ¿ te animas a recogerlo ?, saludos
Hola! pues es una buena razón para dejar una luz, claro que si! Lo se Nerea!Se que tengo pendiente el premio, este finde he estado en puntoMOM y la semana pasada fue un maratón dejando todo organizado. Dame tiempito! Gracias!!
Yo no he tenido ese problema, es más, el problema es más bien el contrario. Como haya un poquito de luz enseguida se despierta. Sin embargo, el terror aparece en cuanto tiene que caminar sola por un pasillo a oscuras, enciende cada interruptor que ve y que, por supuesto, luego no apaga. Enma tiene otros miedos, por ejemplo a que alguien malo pueda entrar en casa. Y no sé porqué…
Cada uno tiene lo suyo….jajajaja. Quizá algún cuento, alguna cosa que ha escuchado en el cole le ha dejado ese run-run ahí a que alguien malo entre en casa….yo de pequeña tenía todos los miedos posibles…a la oscuridad, a que entrase alguien…a los monstruos… un beso, preciosa!
Hoy te voy a contar un secreto!!!
Cuando vivíamos en Guinea yo tenía mi habitación «lejos» -relativamente- de la de mis papis y las ventanas eran celosías con mosquiteras para que pudiera entrar el aire. Cuando había luna llena entraba tanta luz que me asustaba y veía entre las sombras hasta caballos. Y si había un tornado ya no te cuento cómo salía con mi almohada bajo el brazo a la habitación de papá y mamá, casi no pisaba el suelo de lo que corría.
Yo también tuve miedo, cariño, así que entiendo perfectamente el problema, aunque nunca te lo dije… menos mal que luego pasó esa etapa.
Lo de Selene no me lo habías contado y podíamos haberla guardado en el armario, porque era muy fea.
Besos y más besos.
La luna llena en Guinea tenía que ser impresionante!!! Selene de día era bonita, era fashion y diferente :-) un beso infinito.
En casa la miedosa es Aina, la mayor, y lo ha «heredado» de mi…..
Sus miedos ya no son sólo a la oscuridad , no quiere-puede ir sola al lavabo, sea de día o de noche, estar sola… necesita saber que estamos cerca, o los padres o su hermana pequeña. Son temores que hasta ahora los veíamos «normales» pero se hace mayor y van a más y hace muy poquito hemos empezado terapia con psicología, para que nos den algunas pautas y orientaciones… estamos en los inicios, ya os explicaré…
Y enb casa dormimos con luz quitamiedos en el cuarto de las niñas y en el nuestro la luz de la mesita es graduable y está al mínimo, cuando eran bebes me iba genial para no darme ningún golpe y poder verlas en la penunbra sin encender la luz, y ahora que son más mayores… ya me he acostumbrado y no puedo dormir sin la luz al mínimo….
Ya nos contarás qué tal la terapia porque creo que puede ser muy útil tu experiencia. Mil gracias por contarlo! Un abrazo!
Hello!
Pues yo no tengo ese problema (de momento!). De todas maneras le he dejado siempre una luz tenue encendida de noche, es más cómodo como tu dices, por si hay que ponerles el chupete o darles agua.
Un besin!
Yo igual, dejo una lucecita encendida desde siempre y se ha acostumbrado, pero nunca me ha dicho que tuviera miedo. Ignasi siempre se ha despertado a media noche para beber agua o buscar el chupete y así lo podía hacer él solito y no le hacía falta llamarme. Nos ha ido muy bien y mientras le guste la luz no tengo ningún inconveniente en dejársela encendida. Ya llegará un día que me pida que la apague porque le molesta, supongo ;)
Que monada de lámpara, cachorro de momento es pequeño y no tiene problema para dormir ni miedo a la oscuridad. Yo no recuerdo haberlo tenido pero los pobres lo tienen queda pasar fatal… Me ha gustado lo idea del la lámpara, la verdad qué mía sobrinos tiene la quitamiedos y es verdad lo demás las sobras jaja
Un abrazo
Qué suerte que cachorro no tenga miedo porque realmente lo pasan fatal! Un beso enorme!
Pues mira Belen, no se si es miedo a la oscuridad o que nunca ha sabido dormirse sola. Yo le pongo toda la no he una luz muy parecida,es una lamparita de ikea, como un fantasmita pequeño, que dura un montón de horas también, esa que tu tienes me encanta porque se puede colgar.
Pobres chiquinines con sus miedos, yo tampoco la puedo dejar sola.
Besitos
P.d. cuando les juntaste para dormir?
Hola Elisa!Qué cosas estas del miedo…La lámpara es genial, la verdad. Espero que no se nos rompa! jajajaj. Mateo y Amaya empezaron a compartir habitación cuando Mateo cumplió 4 meses aproximadamente. Él dormía del tirón y profundo así que pensamos que sería bueno para los dos y la verdad es que en ese sentido, ningún problema. Mateo se duerme antes y luego yo entro con Amaya.
Un beso grande!